Unos días demasiados ausentes para mí, intentando asentar o buscar motivos para una armonía constante. Puedo y he aprendido a agobiarme con ayuda de otros, cosa que no es ni aceptable ni casual.
El respeto a las personas a de ser mutuo, todos somos como somos en igualdad de condiciones, aunque cada uno tenga su forma de ser o de actuar. No hace falta convertirse en un títere para captar la atención de los demás, ser divertido se puede sin ofender a los demás diciendo cualquier cosa, creando burla o tirar objetos. Hay cosas que hieren por dentro a uno.
Todos sabemos que el bullying es tema de, recopilación de hechos dolorosos y recordarlos una y otra vez por parte de terceras personas. Continúo luchando contra miedos, pensamientos tristes y recuerdos del pasado. Meterse con alguien por edad, físico, apariencia o nivel de estudios o rumores, duele. Existe un daño interno que te crea salidas que no son.
Si buscamos respuestas por estas acciones son difíciles de encontrar la diferencia del acosado y el acosador son muy grandes. Pero hace falta pensar porque lo promueve y que gana con ello, satisfacción, poder, etc. No tengo una respuesta hacia ello, solo sé que yo vivo en contra del bullying, y que odio sufrirlo tanto como otras personas no pido que pare, ruego que desaparezca.
Hay personas que no se enteran de que la rareza es una cualidad única que nadie te puede quitar, te hace especial, por algo somos distintos y no todos iguales. Meterse con alguien por gusto no es plan, por como es, no es motivo, por lo piensa, hace o no hace, no es argumento.
"Las diferencias nos enriquecen, el respeto nos une"
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